Hace mucho tiempo un pueblo aguerrido contaba con la protección de un dios de carácter infernal al que en las noches de luna llena se le ofrecía el sacrifico de una joven virgen. Se dice que en una ocasión uno de los jóvenes guerreros se enamoró de la joven que iba a ser sacrificada, y sabiendo cual era el destino de su amada, la noche en que esta iba a ser sacrificada la raptó y huyeron. La luna estaba saliendo y el sacrificio había que hacerse, pero no encontraron a la victima para la ofrenda, asi que no hubo sacrificio. La deidad, sumamente irritada, hizo que el cerro se abriera con un gran estruendo y se tragó a todos los habitantes, para cerrarse de inmediato. Sólo quedaron las ruinas de lo que había sido un pueblo que con el tiempo fueron cubriéndose de polvo.

Blogger Templates by Blog Forum